Jueves. Cinco y veinticinco de la tarde. Estoy escuchando Here's To The State of Mississippi, canción en acústico de Eddie Vedder, sentado en la cama de mi habitación italiana. Hace 3 meses era una habitación cualquiera. Ya no lo es. Y entre la canción y entre que acabo de recibir unos emails de amigos de los que hacía tiempo que no sabía nada y ahora sé que se acuerdan más de mí de lo que me imaginaba (xD), me han entrado ganas de escribir esas "chorradas filosóficas" de las que he tanto he hablado con alguna que otra persona.
Porque he pasado ya casi 3 meses fuera de mi casa (nunca había estado tanto tiempo fuera). Y es interesante lo que pienso ahora de las cosas, cuando lleve 1 año fuera será interesante pensar lo que pensaba. Eso que te dicen que las cosas se aprecian mejor desde la distancia, dejando que pase el tiempo, es verdad. Se valoran mucho algunas cosas que antes ni te planteabas, eso esta claro. Valoro muchísimo el simple hecho de llegar a casa y tener la comida en el plato, o tener siempre limpio el baño (limpiar un water por dentro no mola), o cosas de este estilo, supongo que es comprensible desde fuera, pero es chocante en el momento en que te das cuenta. La familia, los amigos, los lugares que frecuentas, todo se echa de menos más de lo que parece, no es un tópico cualquiera.
En fin, que os voy a contar que no sepáis, se aprende mucho de las cosas viviendo fuera un tiempo, alejado de tu mundo, y sobretodo se aprenden cosas de uno mismo. Porque no nos conocemos tanto como creemos. Y ahora que he pasado un tercio de mi Erasmus ya empiezo a entender de que va todo esto, por qué la gente habla tan bien de este programa de estudios, y por qué toda la gente que lo ha hecho tiene tanta envidia de los que se van. A mí me pasará lo mismo, ya lo estoy viendo.